Las tensiones entre la Iglesia Católica y el régimen de Daniel Ortega llegan a escalados niveles de tensión y esto ocurre cuando el Monseñor Rolando Álvarez, obispo de la Diócesis de Matagalpa y administrador Apostólico de la Diócesis de Estelí fuese trasalado a Managua durante un ejecutado operativo policial que sucedió en la madrugada del viernes junto a otros sietes sacerdotes y seminaristas que se encontraban retenidos en la curia desde hace 16 días.

Según el comunicado que fuese publicado en las redes sociales, esto sucede como parte del proceso de investigación por parte de la Policía Nacional de Nicaragua y sin detallar la razón de la detención, las autoridades aseguran que los religiosos persistían en actividades "desestabilizadoras y provocadoras".

Gabriela Frías analiza este tema junto a la exiliada abogada nicaragüense Martha Patricia Molina en Houston, TX.

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